Cómo trabajar con seguridad sobre cubiertas no transitables

cubiertas no transitables

¿Qué son las cubiertas no transitables?

Entendemos por cubiertas no transitables aquellas con zonas frágiles, susceptibles de romperse al ser pisadas y que el trabajador sufra una caída a distinto nivel. Suelen ser cubiertas inclinadas con presencia de claraboyas o lucernarios y fabricadas con materiales de cubrición poco resistentes.

Para transitar con seguridad sobre este tipo de cubiertas, es necesario que los trabajos los realice personal cualificado con sistemas de seguridad anticaídas. Además, se deben seguir seis etapas, que trataremos a continuación, para minimizar el riesgo de accidente al desarrollar los trabajos en altura.

Etapas para realizar trabajos en cubiertas de forma segura

Con el objetivo de evitar accidentes que puedan derivar en problemas graves e incluso la muerte, es necesario seguir seis etapas para garantizar un trabajo seguro.

1. Recabar información sobre la cubierta

Un experto debe recopilar información acerca de las características de la cubierta no transitable.

  • ¿Qué medidas e inclinación tiene?
  • ¿Tiene acceso o es necesario instalar uno?
  • ¿Hay lucernarios o claraboyas? Si tiene, ¿Cuántas?
  • ¿Tiene alguna protección anticaída ya instalada?
  • ¿Cuál es el peso máximo que puede resistir la cubierta?
  • ¿Existen elementos e instalaciones en la cubierta o cercanos a ella? Por ejemplo, placas solares sobre la cubierta, líneas eléctricas o conducciones de gas. En caso de que sí, ¿es necesario desconectarlas o tomar alguna medida preventiva?
  • ¿Se realizan actividades dentro de la nave o edificio? En caso de que sí, ¿es necesario paralizarlas mientras se realicen los trabajos?

Estas son algunas de las preguntas que los técnicos se deben responder para hacer una previsión sobre los recursos económicos, materiales y humanos necesarios para realizar el trabajo.

El técnico tendrá que recabar la información a través de documentación técnica y documentación gráfica. La documentación técnica la podrá encontrar reuniéndose con el titular del edificio, con planos de las instalaciones, información del fabricante, etc. La documentación gráfica se proporcionará a través de planos, fotografías aéreas o visitas in situ a la zona.

2. Seleccionar un contratista

Al seleccionar un contratista es recomendable fijarse en tres cuestiones: 1. Económicas, 2. Plazos de entrega y 3. Que realice el trabajo de forma segura.

Los trabajos sobre cubiertas no transitables llevan un riesgo asociado muy elevado, por lo que, es necesario contar con sistemas anticaídas que protejan a los trabajadores de accidentes y caídas a distinto nivel. Por lo tanto, será conveniente recibir un asesoramiento sobre qué protecciones permanentes o temporales se deben instalar, tanto para acceder a la cubierta como para trabajar sobre ella de manera segura.

3. Planificar los trabajos

Un trabajo en altura no planificado a menudo acaba en accidente. Por eso, conocer los riesgos y las medidas preventivas para solventarlos, es esencial para un trabajo seguro. Antes de acceder a cubiertas frágiles se establecerá un procedimiento de trabajo contemplando todos los aspectos y situaciones posibles.

Se deben tener en cuenta previamente distintos aspectos como la forma de acceso y desembarco de los trabajadores en la cubierta, el peso máximo que puede soportar la cubierta, la presencia de lucernarios o claraboyas, etc. Cuando se hayan determinado los riesgos existentes, se determinarán las protecciones colectivas e individuales que se deben instalar.

Por último, es imprescindible también contar con una planificación de rescate para actuar de forma rápida y eficiente en caso de que se produzca un accidente. Es muy peligroso que un trabajador quede suspendido del arnés porque podría darse el denominado síndrome del arnés o trauma por suspensión.

4. Preparar los trabajos

Una vez planificado el procedimiento de trabajo, se deben proporcionar equipos y protecciones en perfectas condiciones, cumpliendo la normativa, asegurar que los trabajadores estén bien formados e informados sobre riesgos, medidas preventivas y procedimientos de trabajo, designar un responsable para supervisar el cumplimiento de las medidas de seguridad y verificar que los trabajadores estén en buen estado físico y mental, confirmado por un certificado médico.

5. Ejecutar los trabajos

Diariamente, antes de comenzar las tareas, el responsable de supervisar y los trabajadores repasarán juntos el procedimiento de trabajo para aclarar dudas y enfocarse en los puntos críticos y normas esenciales. Se revisarán los equipos de trabajo y protecciones, asegurando que todos lleven los equipos de protección individual y estén en buen estado de salud antes de iniciar el trabajo.

Durante los trabajos, el responsable supervisará el cumplimiento del procedimiento desde un lugar seguro y tomará las mismas precauciones si debe acceder a la cubierta. En caso de que se presente una circunstancia imprevista o se determine que el procedimiento de trabajo no cumple con los requisitos de seguridad, los trabajos se detendrán hasta corregir la situación, y cualquier trabajador que detecte un peligro debe notificarlo inmediatamente.

6. Finalizar los trabajos

Una vez finalizados los trabajos, se informará al promotor o titular del edificio sobre las tareas realizadas y se proporcionará la documentación necesaria para el uso y mantenimiento de los elementos incorporados en la cubierta, especialmente sobre los medios de acceso y protecciones permanentes. Esta información permitirá realizar las revisiones y labores de mantenimiento necesarias, así como transmitirla a futuros trabajadores que intervengan en la cubierta.

En definitiva, es fundamental sensibilizar a la población sobre los altos riesgos de realizar trabajos en altura sin la formación y los sistemas anticaídas adecuados. Muchos de estos trabajos se subcontratan y, por desconocimiento, son ejecutados por personal que no cumple los requisitos para trabajar sobre cubiertas no transitables y que no llevan los sistemas anticaídas necesarios y adecuados para evitar sufrir un accidente.

Antonio Tavera Valero
Arquitecto técnico | PRL | ISO 9001

Formado como Arquitecto Técnico y acostumbrado a dirigir a equipos de trabajo, siempre fortaleciendo su implicación y crecimiento en valores como la creatividad e innovación para alcanzar las metas propuestas.

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